Santo Domingo, República Dominicana.– El panorama 2020-2021 para Latinoamérica y el Caribe será desafiante.

Según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), se estima un incremento de 10% de desempleo en la región, lo que impactará en el número de personas en situación de pobreza que podría alcanzar el 35% de la población latinoamericana.


Nueve de cada diez empresas tiene proyectado una disminución en ingresos para este año, mientras que solo el 11.97% no ha sufrido impacto negativo a causa de la pandemia del coronavirus.


Así lo establece el estudio Impacto por COVID-19 en Latinoamérica y el Caribe, realizado por Marsh en colaboración con el Foro Económico Mundial, en el que participaron 534 empresas de 25 sectores en 11 países, entre ellos, República Dominicana.

Este estudio busca conocer el impacto de la pandemia en los diferentes sectores económicos, para ayudar a las empresas de la región a comparar su situación frente a las de su misma industria y/u otros sectores.

Una nota remitida a Con Sentido Social, explica que el trabajo arroja más luz sobre el severo impacto económico que la pandemia ha tenido en el tejido empresarial de la región.

«Para las compañías ha representado un gran desafío el poder mitigar este impacto y poder reabrir para recuperar sus ingresos. De hecho el 52% de las empresas encuestadas, ha visto una reducción en sus ingresos de entre 15% y el 25%, y el 42% ha tenido un impacto de entre 6% y 15% en su cadena de valor», refiere el documento.

De acuerdo a la encuesta, las industrias más afectadas son Manufactura, Servicios, Hospitalidad o Turismo y Comercio, por lo que es imperativo que normalicen sus actividades.

El 67% del PIB de Latinoamérica corresponde a comercios restaurantes, turismo, transporte, hoteles y servicios sociales y empresariales.

“Esperamos que para 2021 la economía empiece a recuperarse, considerando que tomará entre 3 y 18 meses, dependiendo de cada industria y situación local. Ante esta realidad se vuelve critica la colaboración público- privada para ayudar a empresas de todos los tamaños y especialmente PYMES, a retornar/recuperar su actividad económica.” comentó Enrique Valdez, Presidente/CEO de Marsh Franco Acra.

En ese contexto, urge que las empresas mejoren sus estrategias de gestión de riesgos, lo que les ayudará a controlar futuros impactos y a construir organizaciones más resilientes, indicó Gerardo Herrera Perdomo, líder en Consultoría de Riesgos para Latinoamérica y el Caribe de la compañía.

Desde que se declaró la pandemia en marzo de 2020, las empresas han enfrentado grandes desafíos; incluso antes de esta crisis las empresas ya enfrentaban un panorama de riesgos globales interconectados muy complejo, refiere el informe.

De modo, asegura, que la crisis causada por el COVID -19 puso a prueba la sostenibilidad de algunos sectores que han tenido que reinventar nuevas formas de producción para sobrevivir, «sin embargo, conforme han ido avanzando los meses, las empresas se han ido adaptando a estos cambios y medidas necesarias para poder continuar con sus actividades de una u otra manera, con el objetivo en común de reactivar la economía.